En la aldea El Naranjo, perteneciente a la municipalidad de Guastatoya (Guatemala), don Mario Morales se dedica al cultivo del café. Lo hace con mimo, podría decirse que incluso con una cierta carga romántica, poco propia del mundo de los negocios. Empezó hace dos años y está dispuesto a crear su propia marca: Café Montaña de Guastatoya. “Un producto 100% orgánico”, comenta.
“Todo el proceso se realiza con el abono orgánico de las mismas hojas de árboles de sombra que protegen a los cafetales en su proceso de desarrollo y maduración”, insiste nuestro interlocutor. El cultivo del café en Guatemala tiene una larga tradición. Mayor, incluso, de la que pueda existir en países como Brasil, por citar uno de las grandes productores actuales.
La suya no es una tradición que venga de lejos, pero tiene las ideas claras; esas que le proporcionan la experiencia de la vida contemplada desde sus 57 años. “Compré la plantación hace dos años, en 2018”, comenta el señor Morales, que trata que impulsar la producción de este producto, aprovechando las buenas condiciones naturales de la zona para el cultivo de la planta del café.
5 cuadras de café
Fue el 2018 cuando decidió adquirir unas plantaciones de café de 3 y 2 cuadras de superficie cada una. En total, unos 35280 m2 o 3,5 hectáreas. Se encuentran a distintas alturas, uno a 1400 metros de altitud y el otro a 1750 en plena montaña de Guastatoya. Lo suyo no es la cantidad, sino la calidad. Las variedades cultivadas en estos terrenos son café catuai y café catimor.
Actividad económica y más
Fueron varias las razones que lo animaron a dar ese paso, algunas de ellas como se decía anteriormente, con una visión un poco romántica: “Con este proyecto pensaba en el mejoramiento y desarrollo del municipio de Guastatoya, en este caso, a través de la aldea El Naranjo. También me movieron las espléndidas vistas que ofrecen estos terrenos en las montaña y, por supuesto, las condiciones naturales de clima y humedad que ofrece la zona para el cultivo del café (una especie de bosque nuboso similar al que se da en la Sierra de las Minas)”, declara don Mario Morales.
Tratamiento de la planta del café
Dejando por sentado que la planta recibe en todo momento un tratamiento orgánico, el señor Morales nos explica el proceso del cuidado de sus cafetales desde que finaliza la recogida de una cosecha de grano de café hasta que inicia la siguiente.
Empleo
“Damos empleo a 6 agricultores todo el año, que se encargan del mantenimiento del cafetal. En sus trabajos emplean distintas herramientas, como: azadón y machete, antes pasar a la poda. Además, ser realiza el planteo para que las plantaciones no se expongan al daño de adquirir plagas propias de este tipo de cultivos”, explica el señor Morales.
Aparte, se emplea a más personas en la época de la cosecha.
Avance significativo en el proceso
Inicialmente, vendía el grano maduro recién retirado de la planta (café cerezo/a), pero este año ha decidido dar un paso más y muy importante en el proceso de elaboración. Desde 2020, el señor Morales vende en café de su plantación ya empaquetado como café orgánico bajo la marca: “Café Montaña de Guastatoya”, sin duda, un distintivo de calidad.
El corte del café
A cada planta del cafetal se le cortan las ramitas con el cerezo para que el café vuelva a retoñar de nuevo. No se saca grano a grano el fruto de la planta.
Distintos cuidados según la altitud
En la plantación situada a 1750 metros de altura se realizan 4 fases de corte y en la de las tierras bajas (a 1400 metros de altitud) solo 2. Esto es así porque el fruto del café en las tierras altas lleva un proceso de maduración más lento al ser el clima un poco más frío. Por lo tanto, se va retirando a medida que va madurando.
El clima es más cálido 350 metros más abajo, por lo que la maduración es más rápida y homogénea. En este caso, con dos cortes es suficiente para retirar todo el producto en un estado óptimo de maduración.
Cosecha de diciembre a mayo
Se le da la supervisión a la plantación del cafetal para evaluar el momento adecuado para realizar la cosecha; es decir, comenzar con los primeros cortes. Este proceso de recolección comienza en el mes de diciembre y finaliza en mayo de cada año.
Secado del grano
Luego de tener ya el ‘cerezo’ madurado se traslada de la finca, para llevarlo al lugar donde se pone a secar durante 3 semanas al sol. Este procedimiento se realiza con cada corte de café y permite la transformación del café cereza, extraído de la planta, en café pergamino y, posteriormente, en café oro.
Producción
Las plantaciones de don Mario producen unos 35 quintales* de café cereza, que se transforman en 10 quintales de café oro al año.
*1 quintal equivale a 100 libras de Guatemala y una libra de Guatemala a 445 gramos o 0,445 kilos.
Café Montaña de Guatemala, distintivo de calidad
La Asociación Nacional del Café (ANACAFÉ) -ubicada en la Ciudad Capital 5ta calle 0-50 zona 14 de Guatemala- calificó de EXCELENTE el café orgánico Montaña de Guatemala, con una puntuación de 82,5. Esta prestigiosa entidad destacó el sabor, aroma y la excelente relación calidad/precio del Café Montaña de Guastatoya, según nos indica el dueño de la plantación.
Único café con denominación de origen Guastatoya
Otros agricultores de las aldeas de El Naranjo y La Campana también se dedican al cultivo del café, pero ellos lo venden a distribuidores de Jalapa, que seguramente lo mezclen con otros de distintas procedencias, por lo que el único café de Guastatoya es el Café Montaña de Guastatoya.
Molienda, empaquetado y sellado
El proceso siguiente consiste en tostar y moler el café. A continuación se empaqueta y se sella, quedando disponible para su distribución. Todo el proceso se realiza bajo unas selectas condiciones de calidad.
Dónde adquirir el Café Montaña de Guastatoya
De momento, el consumidor solo puede disfrutar de este excelente producto muy a nivel local. Su corta producción impide en la actualidad ampliar el mercado. A día de hoy, se puede adquirir en el supermercado Distribuciones Santa Marta (Guastatoya), en la propia municipalidad de Guastatoya y a través de distribuidores particulares, con lo que el numero de beneficiarios locales de esta actividad económica se extienden también a la red comercial.
En este sentido, el Covid-19 ha afectado un poco a la distribución, porque la pandemia ha obligado a cerrar muchos comercios, según indica don Mario.
Beneficios para la comunidad
El café, además de ser un sabroso producto que se degusta en todos los rincones del planeta, en este caso es una fuente de empleo para las personas que trabajan a diario en su cultivo, también para aquellas otras que participan en la cosecha o corte del café cerezo (a las que se les paga en función de la cantidad cortada) y a las que intervienen en la distribución o venta.
Este cultivo orgánico también ayuda al medioambiente: no lo degrada con productos químicos y evita la desforestación del monte.
El cultivo del café lleva asociada la plantación de otros árboles que les dan sombra, necesaria para un perfecto desarrollo del cafetal. La planta de café debe evitar la prolongada exposición directa a los rayos del sol para su adecuado crecimiento y óptima maduración del fruto.
Los árboles que brindan sombra en el cafetal son, por lo general, el galileo, el paterno o el cuje. Sin las plantaciones de café estos árboles seguramente habrían desaparecido hace tiempo. Sus hojas -especialmente, en el caso del café orgánico- sirven de abono a la planta, como ocurre con el Café Montaña de Guastatoya.
Otras aldeas de Guastatoya dedicadas al cultivo del café
Nos comenta don Mario que también que hay otros agricultores de Aldea la Campana y Aldea el Naranjo de Guastatoya (El Progreso) que se dedican al cultivo del café, pero, una vez retirado de la planta (café cerezo), es transportado y vendido en Jalapa.
Té de tilo
El señor Morales también se dedica al cultivo y a la venta del té de tilo, contando con dos terrenos para su plantación. Cada año obtiene un quintal de la flor de tilo, la cual –una vez cortada- se seca al sol y se empaqueta para su comercialización.
Propiedades del té de tilo
El té de tilo –en este caso otro producto completamente natural- ayuda a la relajación del sistema nervioso, por lo que es bueno en situaciones de estrés, ansiedad o insomnio. Otra de sus cualidades es que, al ser hervido, desprende un aroma muy agradable. El té de tilo crece también en bosques de climas templados.
Montaña de Guastatoya
La aldea El Naranjo (ubicación: 14°48’37.0″N 89°58’43.8″W) se encuentra enclavada en plena montaña de Guastatoya. Elevada a 1400 metros sobre el nivel del mar, presenta un clima más suave (menos caluroso) que la ciudad de Guastatoya (630 metros de altitud).
Por montaña de Guastatoya se entiende un conjunto de elevaciones del terreno que hacen frontera entre este municipio y el departamento de Jalapa y que rozan los 2000 metros de altitud en su cima más alta.
Dicho de otro modo, podríamos concluir que la montaña de Guastatoya viene a ser la cara norte de los denominados montes de Jalapa. Se encuentra en la vertiente derecha del río Motagua y mira frente por frente a la Sierra de las Minas, otra destacada zona cafetera.